Camila de la Fuente Sandner
Practicum 1
El arte de Stephen
Wiltshire, artista inglés, nos sorprendió una vez más recordándonos que
“tenemos que amar lo que hacemos”. Con unos audífonos puestos con música de los
años setenta y una sonrisa sincera, trasmite con sus trazos desenfadados el
caos, el tráfico y la enormidad de la Ciudad de México con tan sólo echarle un
vistazo en media hora desde un helicóptero.
El pasado lunes 24 de
octubre se inauguró en la Torre Bancomer, en conjunto con el periódico Milenio,
la exposición del artista que con el síndrome del sabio, ha dejado impactado al
mundo con sus paisajes de ciudades dibujados a partir de su memoria. Edith
Leija, curadora y museógrafa de la mediática exposición afirma que la respuesta
del público ha sido excelente: “es una oportunidad para reflexionar la propia
ciudad. De darnos cuenta más de nuestro entorno, de verlo y de repensar en el
lugar donde estamos. Me gusta saber que estoy provocando una reflexión, una
controversia, un punto en el que se puede dar un pequeño espacio para pensar ya que por lo general no lo hacemos. Con esta exposición me doy por bien servida.”
Wiltshire luego de viajar
en helicóptero media hora para observar la gigantesca Ciudad de México, comenzó
a trabajar en una amplia mampara en el que se ha tardado aproximadamente 40
horas dibujando a mano suelta. “Es impresionante verlo dibujar y que parece que
los edificios toman forma de la nada. No usa líneas de punto de fuga, no usas
reglas. Solo su memoria y su plumón.” comenta Leija acerca del proceso
artístico de Wiltshire.
El artista contento de
estar en la ciudad, comentó a través de su hermana –con quien mejor se
relaciona- que le sorprendió el tamaño de la ciudad, la cantidad de trafico, el
caos y ruido. Además, quedó maravillado con los edificios de la urbe, que tanto
le gusta dibujar con detalle. Especialmente se interesó en la Torre
Latinoamericana, en la que quiso enfocarse para detallar en su dibujo. “Es un
trazo desenfadado, muy gestual y muy vivo. No es para nada frio, es muy cálido.
Para saber dibujar tienes que observar bien, tiene una gran calidad de
observación.” Agrega la curadora.
Stephen Wiltshire cree que
hay que encontrar para lo que eres bueno y luego hacerlo lo mejor posible. Por
ello, ha dedicado su vida al arte estudiándola en la Universidad. Edith Leija
comenta que “Él no es ningún improvisado, es la muestra que en la genialidad es
un conjunto entre talento, trabajo, constancia, dedicación y disciplina. De ahí
su fama que tampoco es gratuita.”
“Como curadora esta
experiencia me ha dejado muchísimo.” menciona Edith acerca de las aportaciones
de la experiencia que le hicieron en ella como profesional y como persona. Ella
se dedicó a la curaduría, museografía y coordinación de la importante
exposición que estará presente hasta el domingo 30 de octubre. “Como persona me
ha hecho maravillarme por las habilidades humanas, por el dibujo, por el
sentimiento, por la línea, por el arte. En recordar que todo es dedicación, trabajo
y esfuerzo y disciplina. Aunque parezca en un momento que es magia, en realidad
por atrás, hay mucho trabajo y muchas cosas que no se ven.”
Looooquiiiisimooooo !!!
ResponderBorrarMe gusto el articulo, muy interesante, conciso y concreto.
ResponderBorrarExcelente nota! Muchas gracias.
ResponderBorrar