Por Andrea Moreno Gaxiola
Practicum 1
El
pasado 17 de agosto, la policía rusa investigaba a los usuarios de una red
social rusa llamada Vkontakte, la cual es similar a Facebook y bastante popular
en ese país, en la que distintas personas participaban en un concurso de selfis
con cadáveres.
"Una
selfie con los muertos" es el nombre del grupo que organizaba el concurso,
mismo que consistía en que los administradores del mismo ofrecían una
recompensa desde los 1.000 a los 5.000 rublos (de 14,5 a 75 dólares), para las
mejores fotografías tomadas con los difuntos, en las que el fotógrafo tiene que
aparecer sonriente porque "los muertos partieron a un mundo mejor".
La
página, tenía 500 miembros, la policía comenzó a indagar en el caso cuando se
supo que se concedió 5.000 rublos de victoria a una imagen tomada cerca del
cuerpo de una adolescente de 13 años, fallecida en un accidente de tránsito
cerca de Syktyvkar, en el norte de Rusia.
Los
habitantes de Syktyvkar y los allegados de la joven estaban conmocionados al
conocer la noticia en la prensa, y temían que el entierro de la chica fuera
alterado.
"Intentamos
comprender las circunstancias tras esos artículos e intentamos saber si detrás
se encuentra un grupo o una persona en concreto", declaró el portavoz de
la policía local, Alexandre Shidiusov, quien agregó que aún era muy pronto para
conocer las posibles sanciones contra los administradores del grupo.
Poco
después, la red Vkontakte suspendió la página de uno de ellos, llamado Alfred
Poliakov según su perfil, por "actividades sospechosas". Y contactado
por la agencia AFP, éste se presentó como un exprofesor de universidad de 28
años residente en Donetsk, en el este separatista de Ucrania.
"Creamos
este grupo para cambiar las mentalidades en lo que respecta a la muerte. La
muerte es el inicio de una nueva vida", declaró por teléfono, precisando
que había abierto la página un mes antes.
Las
aterradoras selfis, empezaron a preocupar a las autoridades del país, quienes
finalmente decidieron lanzar una campaña para sensibilizar a la gente y
terminar con esta práctica.
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