Por Sebastián Preciado
Practicum 1
Se jugó la ida de los cuartos de final de la UEFA Champions League y como es costumbre, no decepcionó.
De héroe a villano:
El Barcelona derrotó a su archirrival: el Atlético de Madrid en un partido que resultó ser muy parejo y disputado.
Los "Colchoneros" abrieron el marcador al minuto 25 con anotación de Fernando, el "Niño" Torres, sin embargo, pasó de ser héroe a villano en diez minutos al cometer dos faltas de amonestación provocando su expulsión del juego.
En la otra cara de la moneda, el uruguayo Luis Suárez fue el guía del cuadro catalán hacia la victoria, pues se encargó de marcar los dos goles con los que se definió el resultado 2-1, aunque antes del segundo tanto debió haber sido echado del terreno de juego por una patada a un contrario.
Con "gol de vestidor":
El Bayern Münich logró sacar la victoria por la mínima diferencia sobre el Benfica gracias al "gol de vestidor" del chileno Arturo Vida apenas al minuto dos. Después de eso, los alemanes no corrieron con suerte en el resto de las oportunidades peligrosas que generaron.
El delantero mexicano del Benfica, Raúl Jiménez, vio actividad los últimos 20 minutos del encuentro, aunque su participación fue bastante discreta.
Sorpresa en Alemania:
La sorpresa la dio el Wolfsburg al vencer al Real Madrid 2-0 con un penal convertido por el suizo Ricardo Rodríguez y una anotación más de Arnold, ambos en la primera mitad.
Para la parte complementaria, los alemanes se notaron más relajados y conscientes de que el resultado era excelente y que había que conservarlo como fuera, finalmente así fue.
Concierto de errores:
Por último, el duelo de más errores y emociones fue el que disputaron el París Saint Germain y el Manchester City.
La primera equivocación grave fue del delantero estrella de los parisinos Zlatan Ibrahimović, quien tuvo la oportunidad de marcar el primero por la vía del penal a los 12 minutos, sin embargo, su disparo fue atajado por Joe Hart.
Fue hasta el minuto 38 cuando los ingleses encontraron la anotación a través de Kevin de Bruyne. Tres minutos después, Fernando cometió otra pifia al regalarle el balón en su propia área al sueco Zlatan, quien sólo se encargó de empujarlo a la portería rival y sacarse un poco la espina de una mala noche.
Ya en el segundo lapso, ambas escuadras salieron a buscar el arco rival y Adrien Rabiot fue quien lo encontró primero para poner en ventaja a los franceses al minuto 59.
El último tanto del encuentro lo hizo el brasileño Fernandinho para poner el empate a dos definitivo a favor del Manchester City debido a los goles de visitante, mismos que cuentan como primer criterio de desempate en el marcador global.
Las vueltas se jugarán la próxima semana.
Qué bueno que lo segmentas! Así es fácil entenderle !! :)
ResponderBorrarTe vamos a levantar krnalito
ResponderBorrar