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jueves, marzo 10, 2022

Se abre nueva sala en el Museo Franz Mayer

Con la nueva sala el público puede apreciar 56 obras seleccionadas para crear un recorrido por seis siglos de arte.

Nueva sala en el Museo Franz Mayer

Por Marcela Mecalco

El Museo Franz Mayer abrió una nueva sala permanente titulada “Pintura y Grabado, del Medioevo al Modernismo”. En ella se expone una selección de obras de las 800 pinturas y casi 700 grabados de la colección del museo, las cuales están divididas por técnica y tiempo.

El propósito de esta sala es dar un recorrido artístico a través de las obras del famoso coleccionista Franz Mayer. La directora de exposiciones, Nuria Sadurni, comentó en el evento para la prensa que se busca también renovar poco a poco las salas permanentes, encontrando puntos de encuentro entre las piezas para crear una historia. Así mismo, la sala se enfoca en explicar el papel importante de los grabados durante este periodo de tiempo y a través de las diferentes corrientes.

Nuria Sadurni, directora de exposiciones

Nuria también explicó para la Revista COMA, que el proceso para abrir una nueva sala comienza armando una narrativa para así hacer una selección de las obras que encajen. Después se valora si las piezas que el curador desea exponer están en condiciones o se deben de mandar a restaurar.

Para este paso, se consultó también a la restauradora Mariana Mecalco, egresada de la Escuela Nacional de Restauración y Museografía. Dijo que los problemas que suelen encontrarse en obras que han sido guardadas por periodos largos de tiempo pueden variar. Por ejemplo, puede que la pieza tenga desprendimiento de fragmentos, faltantes, craquelados o que se requiera de una limpieza por acumulación de polvo en la superficie, procedimientos que suelen no ser tardados. La intervención se hace para que la obra se encuentre en sus optimas condiciones para ser exhibida.

Después de haber curado las obras, es momento de montar la sala permanente. Esta cuenta con 56 piezas entre grabados y pinturas de caballete divididas en 4 subtemas: Medioevo a Renacimiento, Manierismos y Barroco, Ilustración y Academia, y Modernismo y Simbolismo. Vemos como se mantiene el orden cronológico del concepto inicial con este orden y como a través de la historia existen movimientos contradictorios que tiran y empujan en diferentes direcciones.

Comenzamos el recorrido con obras que mejor representan el estilo de la Edad Media, con mensajes bíblicos y figuras humanas geométricas y sin profundidad, como en 2D. Sin embargo, mientras nos vamos acercando al Renacimiento vemos como la temática cambia y se aleja de lo divino, entrando a una visión antropocéntrica. Aquí vemos puntos de vista más geométricos, con técnicas de punto de fuga y perspectiva para dar una ilusión de profundidad.

Continuando por la sala, vemos el Manierismo tomar forma como una época de exageración de tamaños, movimientos y torsiones de las figuras humanas. Esto es una directa antítesis de la perfección que se buscaba en el Renacimiento. De igual forma, el Barroco es una corriente resultante de la repuesta de la Iglesia Católica ante la Contrarreforma. Los artistas utilizaban un estilo muy recargado en diferentes técnicas.

La Ilustración, época siguiente en la sala, trajo consigo una adoración de la razón y el conocimiento. Es cuando nace la corriente neoclásica, caracterizado por sus líneas limpias y nace la Academia como institución. También se ve mucha pintura histórica que muestra momentos estudiados para retratarlos de la manera más fiel. Sin embargo, esto no dura mucho y a finales del siglo XVIII se desmantela este canon.

Finalmente, la sala concluye con el modernismo y la interpretación de su simbología. Las vanguardias que comenzaron en 1909 con el futurismo buscaban la modernidad al arte, implementando temas como maquinaria, velocidad y movimiento. Es un movimiento rebelde que impacta desde la pintura hasta la escritura. Es crear arte para dejar algo a la humanidad y mostrar la percepción del mundo exterior a través de lo interior de cada artista de una forma innovadora y diferente.

El origen de las obras dentro del museo, lo compartió el curador de este, Abraham Villavicencio, y es que fueron adquiridas por el importante coleccionista Franz Mayer entre 1940 y 1965, de ahí el nombre. Él buscó regresar a México obras de arte que se produjeron aquí, pero fueron llevadas al extranjero. Vía cartas, Franz mantenía contacto con amigos en Nueva York y Europa para conocer las últimas noticias de las casas de subasta de arte del mundo, y así crecer su colección.

Abraham Villavicencio, curador del Museo Franz Mayer

Así es como juntó más de 100,000 piezas de arte en sus viajes alrededor del mundo y más adelante, Franz Mayer fundaría en 1986 el museo. Actualmente, es una de las colecciones de arte más importantes de México que ahora se restaura para que el público pueda apreciar de una nueva forma obras que tal vez hayan visto en otras salas o nuevas de la bodega, listas para quedarse permanentemente.

Este viaje en el tiempo contiene obras de artistas muy conocidos como Labert Lombard o Lucas Van Leyden, Jaques Callot, o inclusive, del famoso holandés, Rembrandt van Rijn. Esto es porque Franz Mayer se esforzó en tener una colección variada con arte europeo hasta novohispano.

Dentro de las obras más importantes podemos encontrar el primer grabado de la Virgen de Guadalupe rodeada de milagros que nunca ha sido mostrada al público. Grabada sobre lámina de cobre, esta pieza se remonta al año 1615 y es considerada la más antigua de la colección. De igual manera, se encuentran en la nueva sala varias obras con un gran valor histórico como obras por Bruyn y José de Ribera.


Evento para la prensa por apertura de la nueva sala

Esta es la primera de una serie de renovaciones a las salas permanentes en el Museo Franz Mayer, comentó la directora de exposiciones. Esto con el propósito de atraer a la gente que ya cree conocer el museo, así como a público nuevo y rotar las obras que se encuentran actualmente en bodega.

De igual manera, comentó el curador que está nueva sala es “una gran ventana al tiempo, al arte y a la sociedad”. Recalcó que nos acerca a otras costumbres, rituales sociales y fiestas ya que todo fue plasmado en el arte para disfrutar y aprender. Así mismo, son una mirada al coleccionismo y el cuidado y mantenimiento que tienen con sus obras, ya que para si están bien conservadas, hablamos de obras amadas y valoradas.

La sala ya se encuentra abierta al público en general y el curador invita todos a que conozcan la colección de estas dos técnicas: “Los esperamos con muchísimo gusto para que conozcan parte de esta fascinante colección de pintura y grabado de nuestro museo y para que puedan hacer un paseo a través de los siglos y del arte”.

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