Entre bellos y barbas - Revista Coma

Covid19

Revista Coma

de los alumnos de la Facultad de Comunicación de la Universidad Anáhuac, México.

Entrada destacada

Empresarios que le deben al SAT.

Crece el pleito entre Ricardo Salinas Pliego y el SAT por los adeudos al fisco. Este tema ha despertado un interés inusitado en redes social...

Post Top Ad

Responsive Ads Here

lunes, mayo 14, 2012

Entre bellos y barbas



C
Del Rastrillo a la Rasuradora
Por Sofía Martínez Vargas
Alumna de la Facultad de Comunicación

En  la actualidad el rasurarse es una práctica cotidiana tanto en hombres como en mujeres; entendiendo el rasurarse como la forma de retirar bello de la piel. Pero es difícil precisar el porqué. Para muchos es una necesidad fisiológica que engloba la higiene y la comodidad, para muchos otros, se trata de una práctica meramente estética. Pero cuál es la línea que las separa y cómo es que esto ha evolucionado a una patología psicológica es un misterio.
La barba en la historia
En la historia, el usar barba o rasurarse ha sido objeto de diversos usos. Para la Grecia antigua, la barba era un signo de sabiduría y conocimiento. Para la Inglaterra de los siglos XVI y XVII tener barba era objeto de impuestos. Para los Amish Americanos significaba matrimonio y signo de edad, respeto.
Abraham Lincoln

En 1850 la barba se consideraba un símbolo de élite, Alejandro III de Rusia, Napoleón III de Francia, Federico III de Alemania, Dickens, Marx y Lincoln llevaban una barba. Pero en la Roma antigua, el estar rasurado era un signo de pulcritud, adultez y elite. A principios del siglo XX, la barba retornaba al significado Griego; Proust, Einstein, Lenin, Trotsky y Stalin son algunos ejemplos. 

¿Estatus, Moda Troquel Cultural?
Como se ve, el uso de la barba es especial en cada tiempo, cultura y civilización. Lo que nos lleva a preguntarnos si su uso es solo ¿estatus, moda o troquel cultural? Para el Maestro Andrés Morales, psicoterapeuta con más de 30 años de experiencia en el ámbito de la investigación en Sociología y Psicología Social, estas variaciones se dan por las modas y las tendencias que son en definitiva factores que influyen en la decisión de rasurarse.

Maestro Andrés Morales
Pero hay otra más arraigada por la cultura. Asegura que en la conciencia colectiva y la generación de estereotipos alimenta esta práctica tan cotidiana y le da un sentido simple pero condicionado al “¿cómo me ven?” que toda persona se cuestiona en algún momento.

     -COMA: ¿Maestro Andrés, la tecnología tiene algo que ver con la popularidad de este fenómeno social?
-AM: Indiscutiblemente la tecnológica ha sido de gran importancia en la preservación inevitable del rasurado y aunado a una conciencia hereditaria y a una necesidad física, la fortalece.
King Gillet
Aunado a lo que dice nuestro entrevistado, hay que apuntar que según los expertos la rasuradora más antigua data de 30, 000 A.C. y era de pedernal. King C. Gillet desarrolló en 1895 un rasuradora portátil con una navaja segura, barata y desechable. En 1904 Gillette vendió 92 mil máquinas de afeitar y 124 mil cuchillas. Pero este número aumentó a 36 millones con la llegada de la Primera Guerra Mundial, las máscaras antigás y la falta de higiene en las trincheras.
Hoy día, la tecnología eléctrica y metalúrgica amplía el espectro de posibilidades al rasurarse, yendo desde la utilización de navajas hasta las más sofisticadas rasuradoras eléctricas.
 No hay que pensar mucho para coincidir con el dicho popular que dice “el que sabe, sabe”, por eso COMA entrevisto a un experto en el tema, precisamente por su oficio, el señor Jesús Olivares del Monte, afamado peluquero mexicano, con más de 50 años de experiencia en el uso de la navaja, la brocha y la espuma para afeitar. Don Chucho como amistosamente le dicen sus amigos y conocidos dice que “el progreso tecnológico no ha sustituido en nada las ventajas del rasurado tradicional”.
     -COMA: ¿Se refiere a las máquinas de afeitar eléctricas, las rasuradoras?, ¿de verdad, no cree que sean eficientes y ahorren tiempo en el afeitado?
     -JOM: Si fueran tan buenas las ventajas de la rasuradora eléctrica, mi negocio estaría cerrado desde hace mucho tiempo.
     -COMA: ¿Cuáles son los beneficios de rasurarse con navaja?
     -JOM: Muy simple, la navaja lastima muy poco, pero la rasuradora eléctrica no te lo corta el bello, lo arranca. Eso irrita y lastima la piel. Por el contrario, la espuma para rasurado junto con la navaja, hacen que la piel se humecte, la protege y da una sensación de limpieza.

¿Por qué la gente se rasura?
    Sobre la opinión de nuestro entrevistado, COMA realizo un breve sondeo con personas comunes. Algunos hombres opinan sobre las ventajas y desventajas del rasurado con rasuradora eléctrica. Los hombres con poco tiempo usan la rasuradora eléctrica, sin embargo, de tener oportunidad, prefieren usar el rastrillo. Por otro lado, los hombres de barba larga escogen este instrumento para mantener arreglada la apariencia de su rostro.


-JOM: Yo pienso que se rasuran por necesidad, pero más que por eso, por verse bien.
Por su parte, el Maestro Andrés Morales precisó que el que una persona decida usar rastrillo o rasuradora “depende, en primer lugar, de que se hace por higiene y comodidad, para eliminar suciedad. En segundo lugar por estética, esta puede ser muy engañosa. En tercero se coloca el clima. Y por último, pero el más importante, el elemento sociocultural.
“Si bien, la sociedad contemporánea se caracteriza por el consumismo, el capitalismo y la hiperrealidad, la característica más preocupante es el conflicto de identidad que sufren los ciudadanos. La globalización, la tecnología y la economía han tocando fibras muy íntimas en la personalidad humana” señaló el maestro Andrés Morales.

            Finalmente podríamos decir que Tanto Andrés Morales como Jesús Olivares, coinciden en que la estética es el fundamento para dejarse la barba o rasurarse. Pero es primordial pensar en lo que Andrés Morales clasifica como “una patología psicológica; una neurosis que deriva de un sentirse bien consigo mismo a una máscara que oculta con un arquetipo lo que no soy pero quiero ser ante los otros.

“Es aquí donde las modas y la conducta colectiva crean clasificaciones de lenguaje no verbal a partir de figuras icónicas, produciendo en la persona una caricatura de lo que debería ser popularmente”, concluyó el maestro Morales.

            Por nuestra parte podemos apreciar que es, precisamente, en este punto en que la mujer se esfuerza por ser delgada, suave y tersa como una perla, y el hombre es viril al momento de usar una barba arreglada o elegante al momento de no portarla. Todas estas imágenes corresponden a las razones trascendentales de la existencia del rastrillo y la rasuradora, ¿o no lo crees tú así?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Post Top Ad

Responsive Ads Here