Por Arturo Corona M.
Michael Bublé llegó a México para quedarse. Su calidad artÃstica y humana dejó una impresión profunda en el gusto de los mexicanos. Este jóven canadiense, hijo de pescadores de la Isla de Vancouver, en Canadá, es ya todo un fenómeno musical. Su vocalización es envidiable para muchos artistas "disney" que gracias a los micrófonos y estudios de grabación se dan el lujo de llamarse "cantantes". Bublé sin micrófono fue capaz de hacer oir su voz hasta la última fila del Auditorio Nacional, algo más propio de un cantante de ópera que de un "crooner" Su contacto con el público fue esencial para que además de su calidad musical, dejara un lugar importante en las preferencias musicales de los mexicanos.
¡ 8 mil pesos boleto !
Lástima de la venta de boletos. Es increÃble cómo se agotan las localidades aún antes de que salgan a la venta. Puedes ser el primero en la taquilla y te dicen ya no hay boletos para los lugares preferentes, los mejores de la casa. Lo atribuyo más allá de la fama o la calidad del artista a esa corrupta liga entre taquilla y reventa.
Asà sucedió con la venta de los boletos de Michael Bublé, el fenómeno canadiense de 37 años de edad que se presentó el sábado 20 y domingo 21 en el Auditorio Nacional. La preventa de localidades fue lanzada del 24 al 26 de junio con precios que variaban entre los 300 a los 1,500 pesos. Las lÃneas de la empresa que monopoliza la venta de los boletos, estaban bloqueadas, en taquilla prácticamente volaron los pocos boletos disponibles de los 10 mil que llenan el Auditorio. Pero el dÃa del concierto la reventa se dejaba pedir hasta 8 mil pesos por un boleto en las primeras filas.
El nuevo crooner
Pero más allá de la crÃtica a la reventa y al monopolio en la venta de boletos, Michael Bublé causó una sensación entre los asistentes: El “crooner”, a quién muchos comparan con Frank Sinatra o con Dean Martin por la manera en que vocaliza, literalmente puso de pie al Auditorio.
En punto de las 21.40 de la noche, y luego de gozar la interpretación del grupo “Naturally7” de Nueva York, siete músicos sin instrumentos que emplean sus voces para similar trompetas, harmónica, baterÃa y guitarras, que fueron muy aplaudidos, se escucharon los acordes de “Cry me a river”, una clásica del compositor Arthur Hamilton. Se corrió el telón para revelar a un Michael Bublé vestido con un elegante traje gris y una corbata delgada negra, el cuello desabotonado, acompañado de 13 músicos, 8 de ellos en las sección de metales, además de la baterÃa, piano y guitarras.
"Miguel Burbuja" en México
De inmediato dijo en español “Hola chilangos, soy "Miguel Burbuja y mi español es una mierda”, lo que de inmediato rompió la distancia entre el cantante y sus fans. Destacaba en su dedo anular izquierdo, una sortija matrimonial. Explicó que acababa de casarse, lo que provocó el abucheo del 50 por ciento de la concurrencia. Dijo que la otra mitad seguramente estaba diciendo que era “gay” lo que aprovechó para decir que aunque lo fuera estarÃa orgulloso de serlo, lo que provocó el aplauso general.
Nada solemne y muy cercano al público, entre los que estaba Consuelo Saizar, la directora de Conaculta, Bublé interpreto su material que vienen en su último álbum “Crazy Love”, “Mack the knife”, “All of me” “Everything”, “I´ve got the world on a string”, “y la bellÃsima “Georgia on my mind”
Bublé se reveló además de ser un gran intérprete, como un imitador. Habló de que muchos le quieren comparar con Frank Sinatra o Dean Martin, pero dijo que en sus orÃgenes en Toronto, Canadá, su inspiración estaba en los Beatles, y en Michael Jackson. Fue cuando imitó al cantante precisamente a un año de su muerte con la interpretación de unas estrofas de “Billy Jean”, y unos pasos al estilo de Jackson. También aludió al grupo “Journey” y canto una parte de “I Gotta Feeling” de Black Eyed Peas”.
A Cappela
Hubo de todo desde fuegos artificiales al terminar su primera entrega de “Cry me a river”, la caÃda de papeles blancos al cerrar el concierto, y su caminar hasta la parte del centro de la parte baja de las butacas rodeado de su gente de seguridad. Un pequeño templete le esperaba en la parte central, para interpretar “All I do is dream of you” y “Some kind of wonderful” Bublé pidió al público dejar el otro pasillo libre para poder regresar al escenario ya que en su camino habÃa sido estrujado entre los asistentes y los de seguridad.
Para cerrar interpretó “Feelling good”, “Me and Mrs. Jones” que inmortalizó Billy Paul, y “A Song for you” aquà hizo gala de su voz al cantar sin micrófono, algo que muy pocos cantantes se pueden dar el lujo de hacer.
El jóven cantante agradeció al público haberlo ido a ver y gastado en su concierto, tuvo palabras de agradecimiento para los estudiantes por el esfuerzo, a los padres de familia por haber dejado a sus hijos con una niñera y dijo “para mi ésta es mi casa”. Después de una hora y media ininterrumpida, cayó el telón y se encendieron las luces. La gente fue saliendo con una cara de haber pasado un buen rato en compañÃa de este fenómeno musical llamado Michael Bublé.
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
ResponderBorrarEl concierto fue maravilloso!
ResponderBorrarClaudia Peña Alvarez
El concierto estuvo buenÃsimo! Pude ser testigo del éxito de quien el dÃa de mañana será, seguramente, una leyenda. Una vez más quedó demostrada la grandeza de la sencillez, y la sencillez de la grandeza.
ResponderBorrarIncreible concierto y excelente show !
ResponderBorrarErika Graff Amescua
me hubiera gustado ir, lástima que se agotan tan rápido los boletos
ResponderBorrar