Daniel Graff: Ironman en la cima

Por: Viviana Leal Reyes / Practicum I

Fotos obtenidas de: @danielgff instagram

“En la vida, es importante ponerte una meta, no tiene que ser deportiva, pero tienes que empujar tus límites porque cuando lo logras, te motivas a hacer algo más grande”. Daniel Graff

Cualquier atleta que se acerca a una línea de salida, tiene una historia que los llevó a ese punto. Una historia de lucha, de triunfo y sobre todo de perseverancia. Así llega Daniel Graff, un Ironman y alpinista que a sus 22 años ha logrado metas y cimas increíbles. 

Daniel, desde pequeño se interesó por el deporte. Su mayor inspiración fueron sus padres que le inculcaron el estilo saludable. A los 6 años empezó en clases de natación y para los 12 años, hizo su primer triatlón. La vida de Daniel siempre ha girado alrededor de los triatlones y el alpinismo pues su padre desde temprana edad también lo llevó a escalar en lugares increíbles como el Iztaccíhuatl, un volcán ubicado en el centro de México y La Malinche en Tlaxcala.

Combinar el triatlón con el alpinismo nunca ha sido un problema para él ya que cuando llega el año de entrenamiento, se propone como reto, las dos cosas. Sin embargo, el Ironman llegó a su vida cuando tenía recién cumplidos los 18 años. Un Ironman consiste en nadar 3.8 kilómetros, hacer 180 kilómetros en bici y correr 42 kilómetros.

Desde chico, vi en la tele el campeonato mundial del Ironman y me llamó mucho la atención cómo es que el ser humano puede llevar a su cuerpo a ese esfuerzo físico. Entonces, empecé a entrenar porque sabía que no podía hacer uno sin tener 18 años. Cuando por fin los cumplí, me volví un Ironman. Explicó Daniel 

El 2016, fue un año emocionante para Daniel, pues se había propuesto la meta de hacer su segundo Ironman en Los Cabos y escalar el Aconcagua en diciembre. Él sabía que para lograr sus metas iba a tener que entrenar con mucho esfuerzo; aunque sabía que prepararse para un triatlón, iba a hacer que estuviera listo también para la montaña.

El Ironman de Los Cabos se llevó a cabo el 31 de octubre del 2016. El atleta, logró un tiempo de 11 horas con 48 segundos y quedó en segundo lugar de su categoría. Hacer un esfuerzo como la prueba más exigente del triatlón puede llegar a ser desgastante, él experimentó todo tipo de etapas, pero logró salir adelante con paciencia y perseverancia.

Un Ironman es 80% mental y 10% físico, experimentas todo tipo de emociones pero tienes que estar concentrado para lograrlo porque cuando lo haces, te sientes indestructible. comentó Daniel

Escalar el Aconcagua, montaña ubicada en la provincia de Mendoza (elevación de 6.962 m y una altitud de 6969, 8 msn), fue el último reto que hizo Daniel en el 2016 y el más significativo. El 5 de diciembre, él junto con 3 compañeros más, viajaron hasta el Parque Aconcagua para empezar la aventura. Fueron 11 días en total los que estuvieron en la montaña, en donde dos días caminaron hasta la base. “El día de cumbre es el más importante” dijo el alpinista. Ahí tuvieron dificultades para subir ya que el clima cambia con una rapidez inexplicable, hubo una tormenta eléctrica que pudo haberles impedido la cima de la montaña. Momentos en donde la paciencia es muy importante. Luego de unos días, pudieron subir a la cima. Daniel colocó una bandera de México y de la Universidad Anáhuac ya que son las cosas que lo representan. 

Llegar a la cima de una montaña, es un sentimiento muy diferente a la meta de un Ironman. Es un momento de paz, de tranquilidad pero sobretodo de saber que estás en el techo del mundo. Dijo Daniel

Actualmente Daniel estudia el octavo cuatrimestre de la carrera de Administración de Negocios en la Universidad Anáhuac. Su próxima meta es subir El Denali, una montaña en Alaska que mide 6 mil 100 metros, donde el reto es el frío. Él es un claro ejemplo de que cualquier meta se puede cumplir, demostrándole a las personas que con esfuerzo y perseverancia se puede lograr. Porque de eso se trata la vida, de superarte a ti mismo, de hacer posible lo imposible.

Radio Anáhuac