Foto: COI |
Por: José Luis Ramírez - @JlPepeRmz
Practicum 1
Hay momentos, lugares y eventos
que cambian por completo la historia de la humanidad. Desde mi punto de
vista, esta edición de los Juegos Olímpicos de Invierno, ha hecho lo propio
uniendo a dos naciones separadas históricamente por la guerra.
La edición número 25 de uno de
los eventos deportivos más importantes en el mundo, se lleva a cabo en la ciudad
de Pyeongchang en Corea del Sur, país marcado profundamente por la división
política derivada de la gran guerra que vive con su vecino Corea del Norte.
Desde hace más de 65 años ambas
Coreas han mantenido una guerra que, si bien hace años no han existido
altercados o bombardeos, la paz nunca se ha firmado. Con constantes amenazas
del líder Kim Jong-un, la tensión parece no frenar, por lo que estos Juegos Olímpicos
representan una bocanada de aire fresco para aquel territorio asiático.
Foto: GettyImages |
Pero, ¿por qué hablar de un
cambio social y político provocado por un evento deportivo?
Estos Juegos Olímpicos han
logrado lo que nadie en un aspecto importantísimo, pues por primera vez un solo equipo representará de manera conjunta a las dos Coreas.
Sí, como lo lees, Corea del Norte
y Corea del Sur participan como un solo equipo, bajo una misma bandera permitiendo por primera vez la
entrada de habitantes del norte a territorio sureño. Esto ha provocado que
estos Juegos ya sean denominados como los "Juegos de la Paz". Ambas Coreas
desfilaron juntas en la inauguración el pasado 9 de febrero,
Foto: GettyImages |
El cambio se está dando, y parece
ser que este podría ser un punto de inflexión para nuevas y mejores políticas
entre los dos países. Solo el tiempo se encargará de demostrar qué tan
importante habrá sido esta unión temporal.
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