También existe el tecno-estrés

Por: Tamara G. Alvarado

Alumna Practicum 1

El pasado domingo 17 de mayo, se celebró el Día Internacional del Internet, esto me lleva a pensar que hoy en día es imposible decir que la tecnología es parte de nuestras vidas cuando en ella basamos absolutamente todas nuestras actividades cotidianas.

Con un mayor rol en el desarrollo de la vida social, los móviles, ya sean celulares, laptops o tablets, cada vez tienen mejores prestaciones y servicios para sus usuarios así como un mejor funcionamiento, al punto en que se han vuelto indispensables en nuestro día a día para estar informados y conectados con los demás.

Sin embargo, por muy eficaz que sea esta conectividad, esta facilidad genera un estrés mayor en sus usuarios denominado "tecno-estrés".

Este término fue impuesto en 1997 por Larry Rosen y Michelle Weil, quienes estudiaban problemas psicosociales. El Observatorio Permanente de Riesgos Psicosociales de la UGT, afirma que este transtorno crea una adicción psicológica al uso continuo y prolongado de la tecnología.

Esta adicción se destaca por la necesidad de adquirir lo último en tecnología con el fin de prevenir la desaparición de las relaciones sociales. 

El tecno-estrés cada vez está más presente y la persona que lo padece, experimenta la necesidad de estar utilizando todo el tiempo sus dispositivos, de lo contrario, sufre la sensación de ansiedad, angustia, estrés, nerviosismo y/o frustración.

De acuerdo al Observatorio, los jóvenes son los principales afectados por este transtorno y la manera en la que recomeinda prevenir su padecimiento, es el limitar el uso de la tecnología a tiempos limitados y a actividades específicas, utilizando el resto del tiempo en actividades recreativas o lúdicas.

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