París, capital del amor

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Por Mayela Ramos, alumna de Practicum 1,

París, la capital del romance según Forbes, es sin duda alguna una ciudad para disfrutarse, llena de hermosos lugares por conocer, repleta de tranquilidad, con miles de formas para enamorarse.

París parece estar diseñada de manera perfecta para el viajero, pues sus estructuras arquitectónicas, sus calles, edificios, plazas, monumentos y jardines tienen el propósito de encantar a sus visitantes y que toda persona anhele volver, pues no hay persona que no quede fascinada con lo que encuentra en esta bella capital.

Trascendentes y clásicas historias de amor que han surgido a lo largo de la existencia del arte de la humanidad, provienen justamente de la inspiración de ciudades como París, en donde estructuras como el Mouline Rouge y la Torre Eiffel han formado parte de películas y cuentos, que generan imaginación y motivación para enamorarse.

La capital de Francia cuenta con gran cantidad de atractivos turísticos que visitar, pues además de la famosa Torre Eiffel y Mouline Rouge, también tiene monumentos muy representativos que son necesarios de conocer como son la Catedral de Notre Dame, que también forma parte de la historia de amor de Disney, “El Jorobado de Notre Dame”, que trata de un hombre con un horrible físico que se enamora de una bella muchacha; el Arco del Triunfo, un lugar hermoso en donde muchas personas que lo han visitado, lo han utilizado para declarar su amor y pedir matrimonio a su amada; la Sagrada Familia, el Castillo de Versalles, los Campos Elíseos, el Museo de Louvre y nada más y nada menos, que el parque de diversiones de Disney.

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Otros magnos placeres que tiene esta ciudad para disfrutar, es la comida, pues París cuenta con una gran cantidad y variedad de restaurantes a lo largo de sus calles, desde lo más económicos que es de 10 euros aproximadamente, hasta lo más costoso que puede llegar a elevarse a más de 25€ por persona. Deliciosos menús completos conformados por mariscos, pastas, carnes, guisados, sopas, ensaladas y, sobre todo, sus placenteros postres, forman parte de lo hermosa que es esta gran ciudad.

Como todo en esta vida, siempre hay cosas buenas y cosas malas. Tristemente París también forma parte de esta afamada frase que ronda por la sociedad, pues así como hay cantidad de preciosos lugares que conocer, también cuenta con lugares muy obscuros que se debería evitar visitar como la estación de metro Chatelet de noche, la Gare du Nord, Barbès, Seine Saint Denis y el RER B rumbo al aeropuerto de madrugada; así que siempre se debe tomar en cuenta la precaución y preguntar en lugares seguros acerca de estas zonas con las que se deben tomar serias medidas de distancia, pues a nadie le gustaría vivir la decepción que algún pequeño descuido, provoque la desilusión de la belleza que esta ciudad nos brinda.    

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