Prácticum 1
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Moana, Mascotas, Sing, Intensa-Mente, Cómo Entrenar a tu Dragón,
Megamente, Mi Villano Favorito y
muchas otras películas animadas han logrado capturar la vida y los corazones de
niños, pero no sólo de ellos, sino también de los no tan niños que no
necesariamente tienen corazones jóvenes, pero que logran involucrarse en estas
historias tan mágicas.
Desde hace algunos años el
tabú de que las películas animadas son para niños, ha ido desapareciendo y ésto
es totalmente cierto, las películas que algún día llenaban las salas de
pequeños, ahora son llenadas de igual manera por adultos y jóvenes que
disfrutan de películas animadas.
Lo que en un principio tenía
como objetivo inculcar valores y enseñanzas a los niños, ahora aplica a chicos
y grandes. La idea de ir al cine a ver una película para “pequeños” ya no es de
aburrimiento sino de entusiasmo, preparados para enamorarse de cada uno de los
personajes que la de dan vida.
El hecho de que las películas
animadas hayan cambiado de mercado ha contribuido a que los adultos puedan
identificarse con los personajes y que al mismo tiempo que sus hijos, primos o
sobrinos aprenden, a su modo, ellos lo hagan.
Las grandes productoras de
este tipo de películas como lo son Walt
Disney Pictures, Pixar Animation Studios, Dream Works Pictures, han logrado
envolver a gente de todas las edades en sus historias originales y con
enseñanzas muy específicas.
No hay que cerrarnos a la
oportunidad de aprender, reír y llorar con películas animadas, que por una hora
y media podamos volver a sentirnos niños y disfrutar como ellos, de olvidarnos
de cualquier tipo de problema con animales que hablan o que sienten, niños que
juegan con dragones, princesas y semidioses que navegan por el mar o un villano
fanático de AC DC .
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