Todas las caras del teatro

Por: Carlos Ferráez
Alumno de Practicum 1


La última vez que vi a Hernán, compartimos una experiencia folklórica mientras desayunábamos tacos de barbacoa en el mercado de Celaya. Ahora, casi un año después, con la barba crecida, me recibe con una sonrisa amplia en la entrada del Teatro Milán, de la Ciudad de México.


Hernán habla y mira un punto fijo en la pared. Su voz es grave y severa, concuerda con su físico alto y robusto. Tiene el grueso de malo de película, aunque su rostro denota una especie de protección paternal perene.


Al puntualizar las diferencias entre el teatro y el cine, gesticula con las manos y bromea con frecuencia. Durante su carrera como actor, ha trabajado de cerca con directores de todas las tallas, y ahora, con ese campo recorrido, ha decidido meterse de lleno a la dirección teatral.

“Ser actor me ayuda a comprender a mis compañeros actores. Habría que preguntarles a ellos, pero yo creo que les ayudo diciéndoles qué hilos jalar, para que ellos fluyan mejor en el escenario. Siento que el hecho de ser actor me hace mejor director, porque conozco el instrumento. Pero bueno, no sé qué tan objetivo puedo ser. Como actor, lo que siempre he hecho, es ser fiel a un principio en el que puedo engañar a todos, menos a mí mismo; si yo me convenzo, entonces estoy haciendo un buen trabajo. Ahora como director, intento aplicar lo mismo. Si logras convencerme a mí es un trabajo sólido.”

El proyecto de dirigir “Huérfanos”, de Lyle Kessler, llegó a sus manos gracias a César Rodríguez, quien forma parte del elenco y además realizó la traducción y adaptación del guión. Él buscó a Hernán por su distinguida trayectoría actoral y terminó aceptándolo como director.

Mientras contesta mis preguntas, Hernán atiende a diferentes personas que se acercan a pedirle conejos; bromea con su equipo de trabajo y da intrucciones al departamento de arte.


El ambiente en el teatro es de fiesta. A menos de una semana del estreno, todos lucen en relajados pero concentrados. Como quien tiene una sólida preparación para lo que viene. César, Hernán y Mauricio, los protagonistas de la obra, sonríen para mi lente que los captura junto al letrero azul fluorescente, en el que se lee “Teatro Milán”.

El ensayo está por comenzar por lo que agradezco a Hernán por su tiempo y lo felicito por el proyecto. Nos despedimos con un firme apretón de manos y la promesa de vernos el día del estreno.

Huérfanos se estrena el viernes 3 de octubre en el teatro Mián. Para más información sigan en twitter a @huerfanosmx o vayan a facebook.com/huerfanosmx